Más cine, por favor
Sep. 5th, 2006 01:01 am![[personal profile]](https://www.dreamwidth.org/img/silk/identity/user.png)
El otro día vi "La joven del agua", y sencillamente me dejó alucinada. En serio, me pareció una película bellísima, pura poesía. Vale, partimos de la base de que a mí me gusta todo lo que haga Shyamalan (¡hey, hasta sé escribir su apellido!). Sí, incluso El Protegido. De hecho, me encantó El Protegido. Y sí, hasta Señales me gustó, aunque admito que sería la última en mi ranking de este director. Lo digo porque sus películas son muy particulares, la mayoría de la gente o las ama o las odia a muerte, y si alguien se toma este comentario como una recomendación, prefiero que antes conozca mis gustos y los compare con los suyos. No quiero que me tiréis piedras, ¿vale?
Pues ahí queda mi opinión. Por supuesto, para gustos están los colores, pero tengo entendido que esta película ha recibido unas críticas bastante salvajes en USA, y la verdad, no se las merece. Te puede gustar más o menos, pero no se justifica que la tiren por tierra. Supongo que lo que le pasa en la peli al crítico de cine y literatura tiene algo que ver en eso.
Besitos húmedos (por lo del agua, malpensadas, que no os estoy tirando los tejos).
Volviendo al tema, la película es preciosa de verdad. Dulce sin ser empalagosa, llena de fantasía sin perder la verosimilitud, oscura pero no tétrica, y con un soplo de esperanza al final. Esto no es una película de miedo con final megasorpresa. Quien quiera eso, que siga viendo El Sexto Sentido, que en eso es una obra maestra. Pero un cineasta no tiene por qué hacer siempre lo mismo, por muy bien que le haya salido la primera vez. Y esta historia es un cuento de hadas, uno que Shyamalan se inventó para sus hijas, para contárselo antes de dormir.
Y vaya cuento de hadas. Qué maravillosa sería la vida en este planeta si, como en la película, las personas se pusieran de acuerdo para ayudar a alguien con tanto empeño. Si algo así ocurriese en la realidad con más frecuencia, no habría tantos problemas en el mundo. Eso es, para mí, lo más bonito de la película. Sabes que en la vida real eso no ocurriría, que alguien siempre metería la pata, pero te da igual. Quieres creer que puede ser verdad, que un puñado de gente sencilla puede lograr prodigios por el simple hecho de querer ayudar, desinteresadamente, a una persona que lo necesita. Quieres creer que hay algo de magia en el mundo, que las leyendas tienen parte de verdad y que, a lo mejor algún día, te puedes tropezar con una.
Qué impresionante también el dilema que se le plantea al Recipiente. Que te digan que el libro que has escrito va a influir en una persona de tal modo que cambiará el mundo para mejor, pero que por publicar esas ideas te van a matar. Tener que reflejar lo que se le pasa por la cabeza a una persona cuando tiene que tomar esa decisión no es nada fácil. Quizá Shyamalan no debería haberse reservado para él ese papel, y dejárselo a un actor más experto, pero en fin.... Por otra parte, habría sido una pena meter ahí a alguna gran estrella que apartara la atención de Paul Giamatti, que realmente está grandioso en la película. Ese hombre inseguro, destrozado por la pérdida de su familia, que tartamudea sin parar menos cuando habla con Story, que es médico pero trabaja de encargado en un edificio de apartamentos porque así al menos siente que de verdad ayuda a la gente, y que cuando se le cuela por las puertas una chica con pinta de chiflada y le cuenta una historia increíble, no duda ni un momento en hacer todo lo que pueda por ella. De Bryce Dallas-Howard no tengo mucho que decir, porque su personaje se limita básicamente a languidecer durante casi todo el metraje, así que no se puede emitir un juicio sobre ella con eso. Es verdad que tiene un aire como etéreo y una sonrisa enigmática, muy propios del personaje que interpreta. Digamos que ella hace su papel.
Otra cosa que me encanta es la estética de la película. La iluminación, por ejemplo. La mayor parte de la trama ocurre de noche y/o en lugares oscuros, pero la escena está tan delicadamente iluminada que siempre logras ver lo que está pasando. O mejor dicho, siempre ves exactamente lo que Shyamalan quiere que veas. Y luego está la manera de usar los efectos especiales. Contar una historia de fantasía requiere efectos especiales, vamos a dejarnos de tonterías. Si en tu guión aparece un monstruo que es como un lobo grande con los ojos rojos y el lomo cubierto de hierba, no vale coger al perro de tu vecino, ponerle unas lentillas y pegarle cuatro briznas de césped encima. Tienes que mostrar a las criaturas, y tienes que hacerlo bien. Pero en ningún momento de la película se hace alarde de ellas. Aparecen cuando les toca, pero no se crea una escena especialmente para mostrarlas en todo detalle. Por ejemplo, cuando al final la gran águila llega para recoger a Story, lo vemos a través del agua, como si estuviéramos dentro de la piscina, sobre cuya superficie, para colmo, está lloviendo. O sea, que sólo te deja adivinar su figura. Y esto es así no por ahorrar dinero en efectos, sino porque al águila no podía verla nadie que no perteneciera al mundo azul o estuviera directamente relacionado con Story. Por lo tanto, a nosotros no nos la puede enseñar.
Es como si Shyamalan creyera a pies juntillas en la historia que está contando. Y, para ser sincera, no estoy muy segura de que no sea así.
Y vaya cuento de hadas. Qué maravillosa sería la vida en este planeta si, como en la película, las personas se pusieran de acuerdo para ayudar a alguien con tanto empeño. Si algo así ocurriese en la realidad con más frecuencia, no habría tantos problemas en el mundo. Eso es, para mí, lo más bonito de la película. Sabes que en la vida real eso no ocurriría, que alguien siempre metería la pata, pero te da igual. Quieres creer que puede ser verdad, que un puñado de gente sencilla puede lograr prodigios por el simple hecho de querer ayudar, desinteresadamente, a una persona que lo necesita. Quieres creer que hay algo de magia en el mundo, que las leyendas tienen parte de verdad y que, a lo mejor algún día, te puedes tropezar con una.
Qué impresionante también el dilema que se le plantea al Recipiente. Que te digan que el libro que has escrito va a influir en una persona de tal modo que cambiará el mundo para mejor, pero que por publicar esas ideas te van a matar. Tener que reflejar lo que se le pasa por la cabeza a una persona cuando tiene que tomar esa decisión no es nada fácil. Quizá Shyamalan no debería haberse reservado para él ese papel, y dejárselo a un actor más experto, pero en fin.... Por otra parte, habría sido una pena meter ahí a alguna gran estrella que apartara la atención de Paul Giamatti, que realmente está grandioso en la película. Ese hombre inseguro, destrozado por la pérdida de su familia, que tartamudea sin parar menos cuando habla con Story, que es médico pero trabaja de encargado en un edificio de apartamentos porque así al menos siente que de verdad ayuda a la gente, y que cuando se le cuela por las puertas una chica con pinta de chiflada y le cuenta una historia increíble, no duda ni un momento en hacer todo lo que pueda por ella. De Bryce Dallas-Howard no tengo mucho que decir, porque su personaje se limita básicamente a languidecer durante casi todo el metraje, así que no se puede emitir un juicio sobre ella con eso. Es verdad que tiene un aire como etéreo y una sonrisa enigmática, muy propios del personaje que interpreta. Digamos que ella hace su papel.
Otra cosa que me encanta es la estética de la película. La iluminación, por ejemplo. La mayor parte de la trama ocurre de noche y/o en lugares oscuros, pero la escena está tan delicadamente iluminada que siempre logras ver lo que está pasando. O mejor dicho, siempre ves exactamente lo que Shyamalan quiere que veas. Y luego está la manera de usar los efectos especiales. Contar una historia de fantasía requiere efectos especiales, vamos a dejarnos de tonterías. Si en tu guión aparece un monstruo que es como un lobo grande con los ojos rojos y el lomo cubierto de hierba, no vale coger al perro de tu vecino, ponerle unas lentillas y pegarle cuatro briznas de césped encima. Tienes que mostrar a las criaturas, y tienes que hacerlo bien. Pero en ningún momento de la película se hace alarde de ellas. Aparecen cuando les toca, pero no se crea una escena especialmente para mostrarlas en todo detalle. Por ejemplo, cuando al final la gran águila llega para recoger a Story, lo vemos a través del agua, como si estuviéramos dentro de la piscina, sobre cuya superficie, para colmo, está lloviendo. O sea, que sólo te deja adivinar su figura. Y esto es así no por ahorrar dinero en efectos, sino porque al águila no podía verla nadie que no perteneciera al mundo azul o estuviera directamente relacionado con Story. Por lo tanto, a nosotros no nos la puede enseñar.
Es como si Shyamalan creyera a pies juntillas en la historia que está contando. Y, para ser sincera, no estoy muy segura de que no sea así.
Pues ahí queda mi opinión. Por supuesto, para gustos están los colores, pero tengo entendido que esta película ha recibido unas críticas bastante salvajes en USA, y la verdad, no se las merece. Te puede gustar más o menos, pero no se justifica que la tiren por tierra. Supongo que lo que le pasa en la peli al crítico de cine y literatura tiene algo que ver en eso.
Besitos húmedos (por lo del agua, malpensadas, que no os estoy tirando los tejos).
no subject
Date: 2006-09-05 09:10 am (UTC)Que Shyamalan aparezca como el recipiente no es casual, creo que piensa que sus películas son testimonios, también es muy probable que sea su particular modo de enfrentarse a los críticos que le acusan de impartir mensajes pseudomísticos, o de su personalidad mesiánica. Si te fijas, hay constantes guiños tanto a la crítica como al público en esta película.
Por cierto, te he encontrado a través LJ de m-enia.
Nos leemos.
no subject
Date: 2006-09-08 09:51 am (UTC)Antes que nada, perdona que no te haya contestado antes, pero ha coincidido que mi marido ha empezado las vacaciones esta semana y apenas hemos parado un momento. He tenido a mi pobre ordenador abandonadito y solo.
Me alegro de que te gustara esta review. Voy a pasarme por tu lj para ver la tuya también.
Un abrazo.
no subject
Date: 2006-09-05 09:22 am (UTC)Tendré que verla, desde luego, que para algo la recomienda mi beta. Luego te diré :p
Besos
no subject
Date: 2006-09-08 09:56 am (UTC)Pero ésta no va de miedo, sino de esperanza. A lo mejor por eso la están vapuleando tanto, porque la gente va a verla esperando El Sexto Sentido otra vez. Lo que son las cosas. Si siguiera haciendo pelis de miedo, seguro que lo criticaban por falta de originalidad.
Besitos.
no subject
Date: 2006-09-05 12:29 pm (UTC)Definitivamente, la agendo para este fin de semana, que no podré viajar a San Juan debido a un curso que me han enviado.
Amo las películas de este tipo, pero curiosamente, prefiero mil veces más Señales que El Protegido.
Debe ser porque lo que yo veo en Señales se ve que lo que veo yo nada más. Y mi mejor amigo.
Besos
no subject
Date: 2006-09-08 10:04 am (UTC)La verdad, me da mucha pena que el cine de Shyamalan esté tan infravalorado. Quizá le habría ido mejor si hubiera dejado "El Sexto Sentido" para el final de su carrera en vez de hacerla al principio, porque está claro que la gente siempre va a esperar lo mismo de él.
Un gran beso.
no subject
Date: 2006-09-08 12:00 pm (UTC)Lo que yo vi fueron los matices de la gente ante esta posibilidad. El abanico de reacciones humanas. La manera en que cada uno intenta, a su manera, de encontrar la fuerza, el consuelo, la solución.
Que hay gente que grita, llora, se desespera, se golpea el pecho y abre los brazos en resignación. Y hay gente que no.
Y que de última, cualquiera sea, es la fe lo que te mantiene en pie. La fe en Dios, en los hombres, en tu familia, en vos mismo.
Siempre he pensado que Señales no habla de las señales de los de afuera, sino de las que nos guían internamente a la hora de enfrentarnos con las peores versiones de nosotros mismo.
Besos, Isa.
no subject
Date: 2006-09-07 03:51 pm (UTC)Para que no se diga que no cumplo con aquello de "Vos lo pedís, vos lo tenés"
Besos
no subject
Date: 2006-09-08 09:36 am (UTC)Besos