En mis momentos de lucidez, coincido contigo plenamente. Dean tiende a dar a Cas un poco por sentado, está acostumbrado a que sea excepcionalmente fuerte, a que siempre consiga volver pase lo que pase, etc. etc. Si me apuras, hasta te diría que es muy significativo que Dean sea capaz de tratar a todo el mundo menos a Castiel con cariño, que es una señal de que tiene miedo a mostrar sus sentimientos por él porque son más intensos de lo que es capaz de manejar. Vamos, que no pueden ser más OTP ni queriendo.

Pero en mis momentos más puramente hormonales... ay, hermana, ahí sólo veo que Kripke se ha autoinsertado en la serie como Dios para liarse con una fangirl wincestista. Y que le parece bien que Sam y Dean se pasen las noches mirando las estrellas, pero hacer que Dean le tenga consideración, agradecimiento o afecto al ángel que lo ha dado absolutamente todo por él es inaceptable. Creo que está bastante claro qué pairing es el que Kripke favorece. Lo favorece tanto, que en su esfuerzo por demostrar que Dean no está enamorado de Cas, lo hace quedar como un capullo desagradecido.

Pero en fin, como tú dices, tenemos sexta temporada, y sin Kripke. A ver si Sera lo hace mejor.

Lo que está claro es que Dean y Cas no van a dejar de ser OTP épica sólo porque los guionistas les hagan actuar de una manera que no tiene sentido después de todo lo que han vivido juntos. Vamos a seguir shippeándoles contra viento y marea, porque ellos lo valen.