No sabría explicarte por qué Sam evoluciona y Dean no. A lo mejor es porque Sam siempre ha sido más introspectivo que Dean. Al crecer sintiéndose diferente al resto de su familia, es lógico que haya pasado muchos ratos leyendo (para evadirse de su realidad) y reflexionando a solas. Tiene más práctica en eso de analizar sus sentimientos. O a lo mejor es porque Dean acusa más la ausencia de una madre, y lo único que aprendió de John en ese sentido es que los problemas se solucionan con una escopeta y unos cuantos cartuchos de sal, no hablando.
Creo que Dean se siente fracasado con Sam. Su "misión" era salvarle, y no pudo. No se siente capaz de influir en el comportamiento de Sam (nunca ha podido hacerlo, en realidad), así que está decidido a salvarle por el método Winchester: si mata a Lucifer ya no habrá peligro de que Sam le diga que sí.
Tú y yo vemos ese razonamiento como algo absurdo, claro. Es igual que si unos padres decidieran que para que su hijo no tome drogas, en vez de informarle de lo peligrosas que son, decidieran acabar con todos los narcotraficantes del mundo. Pero es que Dean, ahora mismo, no sabe hacer otra cosa.
No estoy diciendo que tenga razón al decirle a Sam que lo entierre todo. Sólo digo que no se le pueden pedir peras al olmo. Francamente, si Dean se hubiera puesto en modo sharing&caring en ese momento, me habría parecido muy OOC.
A lo mejor, más adelante, a medida que vaya avanzando la temporada, las cosas cambian. Ojalá. Pero éste no era el capítulo de dar las soluciones, era el de plantear los problemas.
De todas formas, en esta temporada sí que hemos visto a Dean dispuesto a hablar las cosas, aunque creo que ha sido una sola vez: con Bobby, en The Curious Case of Dean Winchester. No es que sea mucho, pero hay esperanzas para este chico.
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Creo que Dean se siente fracasado con Sam. Su "misión" era salvarle, y no pudo. No se siente capaz de influir en el comportamiento de Sam (nunca ha podido hacerlo, en realidad), así que está decidido a salvarle por el método Winchester: si mata a Lucifer ya no habrá peligro de que Sam le diga que sí.
Tú y yo vemos ese razonamiento como algo absurdo, claro. Es igual que si unos padres decidieran que para que su hijo no tome drogas, en vez de informarle de lo peligrosas que son, decidieran acabar con todos los narcotraficantes del mundo. Pero es que Dean, ahora mismo, no sabe hacer otra cosa.
No estoy diciendo que tenga razón al decirle a Sam que lo entierre todo. Sólo digo que no se le pueden pedir peras al olmo. Francamente, si Dean se hubiera puesto en modo sharing&caring en ese momento, me habría parecido muy OOC.
A lo mejor, más adelante, a medida que vaya avanzando la temporada, las cosas cambian. Ojalá. Pero éste no era el capítulo de dar las soluciones, era el de plantear los problemas.
De todas formas, en esta temporada sí que hemos visto a Dean dispuesto a hablar las cosas, aunque creo que ha sido una sola vez: con Bobby, en The Curious Case of Dean Winchester. No es que sea mucho, pero hay esperanzas para este chico.
Un beso, guapa.